Se excusa largamente por su largo silencio postal. Expresa su deseo de encontrarse con él en Buenos Aires. En relación a la posibilidad de viajar al Ecuador en calidad de conferencista, afirma su predisposición total y aceptación alborozada.
Afirma que se cuenta entre los admiradores del "talento literario" de Bioy Casares. Señala que escribe ocasionalmente para Clarín bajo el seudónimo de "Hugo Lamel". Felicita a Bioy Casares por el Gran Premio de Honor que acaba de otorgarle la SADE.
Expresa su deseo de concretar los proyectos de dictado de dos cursillos universitarios en La Habana: sobre marxismo latinoamericana (Ponce-Mariátegui-Mella) y sobre la relación entre ideología y cultura. Siguen detalles. Señala que, de concretarse finalmente la invitación docente, le gustaría esta vez viajar a La Habana acompañado por su mujer.
Felicita a Taiana por su nombramiento como ministro de Educación. Hace su elogio de su persona, remitiéndose en el marco del mismo al libro de su autoría Nación y cultura.
Se lamenta de no haber podido encontrarse con Garibaldi en Lisboa y los demás amigos que gravitan alrededor de la revista y editorial lusitana "Seara Nova". Señala que su demora en responder se debió a que se encontraba abocado a la corrección de la traducción brasilera de Tántalo recobrado realizada por Venede Nobre cuatro años antes, que adjunta como posible material de cotejo para la nueva traducción al portugués de la misma obra que se encuentra actualmente preparando la editorial "Seara Nova" de Lisboa.
Vuelve a enviar las "90 líneas perdidas" [muy presumiblemente, en alusión a una nota aclaratoria a ser publicada en La Opinión, en respuesta a "los desatinos de La Nación"]. Hace explícita su contrariedad frente a la caracterización de su persona realizada por La Opinión, ya que lo denomina "político" ( y no "escritor"). Respalda sus credenciales de escritor en tanto, entre otras cosas, está a su cargo la ordenación de las obras completas de Aníbal Ponce.
Se excusa por su demora en escribir. Se alegra porque le haya gustado su informe: espera debatirlo con él en la Asamblea Nacional del 8 y 9 de septiembre. Responde a a algunos reparos al informe expresados al parecer por Gudiño Krámer, especificando qué entiende él por "salida". Responde asimismo a los dos problemas planteados por Gudiño Krámer en su carta: el referido a Sarmiento y el relativo a a la calificación del campesino y la posibilidad de ser confundido con la masa del proletariado nacional. Desarrolla abundantemente, también apoyándose en determinadas citas de autoridad. Acusa recibo de libros de relatos enviado por Gudiño Krámer: de tener tiempo, promete escribir una reseña para Cuadernos de Cultura.
Señala que no recuerda haber recibido ni corregido ningún manuscrito de "Nicolás" sobre "la lucha clandestina en Paraguay", tal como éste por su parte afirma que ocurrió. Deplora este malentendido.